
Que hable de vos
- Elegí objetos que tengan significado: una foto con amigas, una carta escrita a mano, una piedra de un viaje o una taza que te regalaron.
- Sumá algo que hiciste vos: una pintura, un dibujo, una frase escrita en papel kraft con tu letra.
- Mostrá tus gustos: libros, películas, plantas, discos… lo que amás también decora.
🛋️ Cada rincón cuenta
- Armá tu “espacio favorito”: puede ser una esquina con almohadones y velas, o una repisa con tus cosas preferidas.
- No hace falta llenar todo de golpe: cada rincón puede ir creciendo con vos.
- Cambiá cosas de lugar cada tanto: redescubrir lo que ya tenés es una forma de renovar sin gastar.
🌿 Colores que te representen
- No elijas colores porque están de moda, sino porque te hacen bien.
- Los tonos tierra, pastel o neutros dan calma. Los vibrantes, energía. Vos decidís qué necesitás en cada espacio.
- ¿Te gusta todo? Podés mantener una base neutra y sumar color en detalles: almohadones, velas, láminas.
🧶 Texturas que abracen
- Usá materiales que te den gusto tocar: mantas tejidas, alfombras suaves, madera al natural.
- Combiná texturas: liso + rugoso, frío + cálido, opaco + con brillo. Eso le da vida al ambiente.
- Tip: una manta o una funda de almohadón puede cambiar por completo la energía de un silló
🕯️ Creá atmósferas
- La iluminación lo es todo: probá con lámparas bajas, guirnaldas o velas.
- El aroma también decora: usá sahumerios, esencias, flores secas, o incluso café recién hecho.
- La música cambia la vibra del ambiente: armá tu playlist para cada momento del día.
